Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama

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Dejamos atrás Cáceres y el Parque Nacional de Monfragüe y llegamos al centro de la Península, donde se encuentra el último Parque Nacional declarado en España, el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, por lo que ponemos fin a nuestro recorrido por los Parques Nacionales españoles, más que nada porque de momento no hay más, aunque no se acaban las zonas protegidas en nuestro territorio, ya que existen más figuras de protección como hemos podido ver en esta serie de post.

Está situado en la vertiente sureste de la Sierra de Guadarrama, que forma parte del Sistema Central, entre la Comunidad de Madrid y la provincia de Segovia, en la comunidad de Castilla y León. Fue declarado como Parque Nacional en 2013, mediante la Ley 7/2013, de 25 de junio, de declaración del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Como suele ser habitual, no es su única figura de protección. Es también Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), Reserva de la Biosfera, y está incluido en el listado internacional del Convenio Ramsar.

Mapa del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama
Mapa del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama

Su superficie de 33960 hectáreas se reparte entre las 21714 que pertenecen a la Comunidad de Madrid, y las 12246 hectáreas de la provincia de Segovia. También cuenta con una zona periférica de protección de 62687, 26 hectáreas. Por su situación en el centro de la Península Ibérica, se encuentra en una zona de clima mediterráneo continentalizado, pero hay que tener en cuenta que está en plena sierra, por lo que el clima varía notablemente dependiendo de la altura.

En general el clima es más húmedo y más frío que el de la meseta, y la diferencia es mayor según aumenta la altitud. Entre los 800 y 1400 metros sobre el nivel del mar, las precipitaciones anuales medias suelen situarse entre los 700 y 800 mm, con temperaturas medias entre 10 y 11 ºC, con máximas de 28 ºC en verano, y mínimas de -6 ºC en invierno. Entre diciembre y febrero las precipitaciones suelen ser en forma de nieve, aunque no suele permanecer más de 3 días debido a las temperaturas.

Entre los 1400 y los 2000 metros sobre el nivel del mar, las precipitaciones anuales medias están entre los 900 y 1000 mm, y la temperatura media es de 9 ºC, con máximas de 25 ºC en verano, y mínimas de -8 ºC en invierno, tiempo en el que las precipitaciones suelen ser en forma de nieve, que permanece en el suelo de forma permanente durante el invierno.

Entre los 2000 y los 2428 metros sobre el nivel del mar las precipitaciones medias están entre los 1200 y 2500 mm, incrementándose según aumentamos la altura. La temperatura media está entre los 6 y los 7 ºC, con máximas en verano de 22 ºC y mínimas en invierno de -12 ºC. En esta franja las precipitaciones suelen ser en forma de nieve entre noviembre y mayo, permaneciendo la nieve en el suelo durante todo el invierno y gran parte de la primavera.

Montañas cubiertas de nieve que darán de beber a todos los habitantes de la zona cuando llegue el deshielo. Fotografía del CENEAM-MMA
Montañas cubiertas de nieve que darán de beber a todos los habitantes de la zona cuando llegue el deshielo. Fotografía del CENEAM-MMA

La flora del parque está constituida por varios pisos. En el piso alpino las laderas están cubiertas por pastizales de alta montaña. Debajo de estos, en el piso subalpino podemos encontrar pinares naturales de pino albar, que son los que están en mejores condiciones en España. Por debajo de los pintares, el piso montano está cubierto por formaciones de rebollo, que a veces invaden los pinares, pero no se pueden talar ya que están protegidos.

En la zona más occidental del parque cambian las especies. En vez de pinos silvestres, hay pinos piñoneros, y en vez de formaciones de rebollo, encontramos quejigos y encinas, ya que es una zona más baja y con menos precipitaciones.

Un caso especial del parque es el Monte Abantos, que se ha quemado en varias ocasiones con repoblaciones un tanto dudosas, ya que se realizaron con especies de rápido crecimiento pero que no son autóctonas, por lo que se da un mosaico de vegetación poco usual.

Magnífico ejemplar de águila imperial. Fotografía del CENEAM-MMA
Magnífico ejemplar de águila imperial. Fotografía del CENEAM-MMA

Pasamos a la fauna, donde podemos encontrar una gran variedad de especies. Podemos encontrar mamíferos como ciervos, jabalíes, corzos, gamos, tejones, gatos monteses, zorros, lobos, liebres, y muchas más especies. También encontramos mucha variedad de aves acuáticas debido a los embalses que hay en la zona, además de grandes rapaces como el águila imperial o el buitre negro.

También habitan temporalmente el parque aves migratorias, como la grulla, que pasa los veranos en el parque y en invierno migran al norte de África. En invierno llegan de Europa las cigüeñas y las aves rapaces. Entre las especies en peligro de extinción están la cigüeña negra, el águila imperial. Un caso especial es el del lobo, que llegó a ser exterminado, pero ha vuelto a detectarse.

Pues con este post ya terminamos nuestra serie dedicada a los Parques Nacionales españoles. Aun así todavía quedan muchas áreas protegidas, tanto en España como en el resto del mundo, de las que poco a poco iremos publicando post, por lo que esto en principio no acaba con este parque, que espero os animéis a visitar.